La Terapia Gestalt busca desarrollar el potencial humano y el crecimiento personal. Más que sanar un síntoma, busca ir a la raíz. Se centra en que la persona que acude a terapia adquiera un conocimiento sobre sí misma, de tal manera que pueda tomar las riendas de su vida con más claridad y gozar de una mayor salud emocional, mental y corporal.
Los 3 principios sobre los que se asienta esta corriente terapéutica son:
- Aquí y ahora: momento presente
- Toma de conciencia: ¿de qué me doy cuenta en el aquí y ahora?
- Responsabilidad: con esto que me doy cuenta, ¿qué elijo hacer?
En definitiva, se trata de un proceso de autoconocimiento profundo que facilita el hacernos conscientes de aquello que nos perjudica para que así podamos actuar sobre lo que nos aleja de nuestro bienestar y desarrollar nuestros propios recursos para vivir una vida con serenidad y plena.